El lunes 14 de octubre, la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de El Salvador afirmó que la elección de Salomón Padilla, presidente de la Corte y de la Sala,  por parte de la Asamblea Legislativa, era inconstitucional a raíz de la membresía de Padilla dentro del partido izquierdista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).  La decisión le resta a la Sala su primer y único miembro progresista en décadas; los magistrados que restan (conocidos popularmente como “Los Cuatro Fantásticos”) han representado consistentemente a los intereses del partido derechista Alianza Republicana Nacionalista (ARENA). Mientras se avecinan las elecciones presidenciales del 2014, esta decisión puede dar muestras de una estrategia de utilizar la Corte para vetar una victoria del FMLN. De hecho, como se ha notado en Honduras y Paraguay, el golpe de estado judicial o “constitucional” se ha convertido en el medio favorito utilizado por la derecha latinoamericana con el apoyo del gobierno estadounidense para derrocar a los presidentes democráticamente-electos quienes demuestren simpatías izquierdistas. Este golpe interno entre los magistrados tiene preocupantes implicaciones políticas. Como observa el Dr. José Humberto Morales, profesor de derecho en la Universidad Nacional de El Salvador, casi todos los presidentes previos de la Corte Suprema eran miembros de ARENA, muchos con “afiliaciones partidarias muy explícitas”. Por esto, el nombramiento de Padilla en el 2012 fue un hecho histórico, resultado de una brutal negociación de 27 días mediada por el Presidente Funes en la Asamblea Legislativa que terminó deshaciendo el control histórico que ha tenido ARENA sobre el judicial. ARENA se ha opuesto a cualquier otro partido en la Asamblea después del anulamiento por parte de Los Cuatro Fantásticos del nombramiento de los diez magistrados, perdiendo de este modo una seria credibilidad por ser  el único obstáculo a la resolución del conflicto generado por la Corte. De hecho, un cable de la embajada de los EE.UU filtrado en el 2008 reveló que ARENA planea enfocarse en el “control de instituciones claves, incluyendo a la CSJ” en caso que ganara Mauricio Funes las elecciones del 2009 y de este modo poder desestabilizar y obstruir el manejo del gobierno. Desde que fueron electos en el 2009, Los Cuatro Fantásticos han emitido una serie de resoluciones controversiales  y han anulado varios  nombramientos de oficiales públicos por parte de la Asamblea, incluyendo a  un Fiscal General, tres magistrados de Corte de Cuentas, un magistrado del Tribunal Supremo Electoral, un Ministro de Seguridad, un Director de la Policía e incluso diez magistrados de la CSJ. La Asamblea todavía no ha nombrado a otro presidente de la Corte y la Sala, pero el favorito hasta ahora aparenta ser la magistrada Elsy Bueñas de Avilés de la Sala de lo Criminal de la CSJ, quien ha sido vinculada al partido de derecha Gran Alianza de Unidad (GANA). Mientras tanto, el papel que ha jugado el CSJ en golpes de estado recientes en los cercanos países de Honduras y Paraguay atestiguan las posibles intenciones de los Cuatro Fantásticos. Mientras el FMLN sigue liderando en las encuestas, los magistrados derechistas parecen estar consolidando su poder en preparación para las elecciones.