Escándalos han surgido en varias ciudades con gobiernos municipales conducidos por el partido de derecha, la Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), quienes se han hecho acreedores en las semanas recientes, de las críticas de residentes, legisladores e incluso del mismo Presidente Mauricio Funes.

El 7 de octubre, los alcaldes de ARENA recientemente electos en Mejicanos y en Ilopango desencadenaron ultraje público cuando anunciaron que habían aprobado aumentos salariales para ellos mismos y sus consejos municipales, los mismos organismos encargados de aprobar tales medidas. Después, salió a luz que los alcaldes de Soyapango y de Apopa habían hecho igual. Los cuatro municipios han sido gobernados históricamente por el partido de izquierda, el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, (FMLN), pero fueron ganados por los candidatos de ARENA en las elecciones de marzo de 2012.

Mientras que las y los habitantes de clase obrera de estos cuatro suburbios de la capital San Salvador siguen sufriendo los impactos de la crisis económica de 2008 y de sus consecuencias, los aumentos anunciados en Mejicanos equivalen a un gasto adicional de $16,000 al mes para el presupuesto municipal, o $172,000 al año, con la alcaldesa de Mejicanos, Juana de Pacas, aumentándose su propio sueldo mensual de $1,900 a $4,000. El alcalde anterior de Mejicanos Roger Blandino Nerio, quien efectivamente bajó su salario mensual en $200 cuando él tomó el cargo en 2006, expresó su indignación: “Por eso se suprimen programas sociales y proyectos en las comunidades. Esta gente está haciendo pedazos lo mucho que costó construir.”

Los aumentos salariales son aún más condenables cuando son los mismos representantes de ARENA en la Asamblea Legislativa que han estado exigiendo medidas de austeridad al gobierno central. De hecho, su fracción legislativa exigió recientemente un congelamiento del 10% en el presupuesto público del 2013 como condición para aprobar el pago de una deuda adquirida durante la administración de su propio ex-Presidente Francisco Flores. Al final, los diputados de ARENA ni tan siquiera votaron para aprobar el presupuesto, aunque sí lo hicieron cuatro de sus diputados, ocasionando un fraccionamiento en el partido de derecha.

El Presidente Funes regañó a los alcaldes de ARENA, diciéndoles que éste “no es el momento de estar entregando bonos, ni de estar incrementando salarios, al menos en el sector público.” Él agregó, “Los alcaldes, independientemente del partido que sean, que han tomado la decisión de incrementarse sus salarios o de incrementar salarios al concejo municipal, deberían de analizar la situación que vive el país”.

Como consecuencia de la protesta pública, Pacas ha anunciado desde entonces, que ella mantendrá los aumentos para sus consejeros, pero que revertiría su propio aumento del sueldo. Pero a pesar de las peticiones de la prensa y del público, Pacas ha rechazado proporcionar la documentación de la revocación y los medios de comunicación informan que ha seguido cobrando el salario aumentado. El Alcalde Elías Hernández de Apopa también anunció que él revocaría los aumentos aprobados para los concejales de Apopa en mayo pasado. El Alcalde Salvador Ruano de Ilopango y su consejo municipal han negado al público los aumentos que aprobaron cuando asumieron sus cargos. Varios municipios gobernados por ARENA, incluyendo Ilopango y Soyapango, ahora están violando la Ley de Acceso a la Información Pública, negándose a hacer disponible para el público información sobre salarios, el presupuesto, y gastos municipales, a pesar de repetidas peticiones.

“Todos esos personajes son hijos de Norman Quijano. Son los que él propuso y acompañó” dijo Blandino Nerio, refiriéndose al alcalde de la capital San Salvador, quien es también candidato presidencial de ARENA para 2014. “No sorprende aunque sí ofende,” agregó el alcalde anterior de Mejicanos. Además de ejecutar el reciente desalojo violento de miles de vendedores informales del centro histórico de San Salvador, Quijano ha sido denunciado por despedir unos 850 trabajadores municipales en su primer período como Alcalde y por comprar recientemente un vehículo blindado en $112,000 de un distribuidor no registrado con fondos municipales.

Blandino llamó los escándalos que engullían los nuevos municipios ganados por ARENA: “una lección política para el ciudadano,” advirtiendo que las controversias demuestran que clase de gobierno tendría el país si triunfara Quijano en los comicios presidenciales del 2014.