En la tarde del martes 29 de junio, en Apopa, un importante municipio de clase obrera en las afueras de San Salvador, un miembro del Consejo Municipal perteneciente al partido de izquierda Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional(FMLN) fue abatido a tiros cuando regresaba a su domicilio en la colonia Valle del Sol.

El asesinato de René Antonio Díaz Orellana se produce tan sólo unas semanas después de que el alcalde de Apopa, José Elías Hernández, del partido de derecha Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), fuera detenido, junto con docenas de empleados municipales, por colaborar con bandas criminales locales. Como informó Insight Crime, la oficina del Fiscal General de la República declaró que el alcalde y otros empleados municipales “ofrecieron bienes y puestos de trabajo –pagados con fondos públicos– a miembros de pandillas a cambio de los votos de los pandilleros y la promesa de reducir los niveles de violencia (...) Los fiscales también acusaron al alcalde de haber ordenado, el 1 de noviembre de 2013, el asesinato de un pandillero.”

En la semana previa al asesinato de Díaz Orellana, éste y otros empleados municipales habían denunciado que estaban recibiendo llamadas a sus teléfonos personales amenazándolos de muerte si no abandonaban su trabajo en el gobierno municipal. Medios de  comunicación locales han informado de que las amenazas se hicieron en represalia por el arresto y los cargos presentados contra el alcalde a principios de este mes.

En estos momentos, el Comité en Solidaridad con el Pueblo de El Salvador (CISPES) desea expresar su más sentido pésame a los amigos y familiares de René Antonio Díaz Orellana, miembros de los comités de base del FMLN en Apopa, dirección del FMLN y al partido como en su conjunto por esta violenta y devastadora pérdida.

También queremos expresar nuestra indignación por los aparentes motivos políticos y de venganza  del asesinato. En un momento en que el aumento del número de asesinatos y de la violencia está aterrorizando a la nación, las acusaciones como las formuladas contra el alcalde de Apopa y otros miembros de su gobierno municipal plantean serios interrogantes sobre una posible colaboración entre líderes de la derecha del país y grupos criminales, en busca de beneficios personales o ganancia política.

En CISPES nos hacemos eco de las demandas de la Comisión Política del FMLN y hacemos un llamado a las autoridades de El Salvador para que investiguen y detengan tanto a los responsables materiales como intelectuales de este horrible crimen y los lleven ante la justicia.

Cada vida perdida por causa de la violencia y la delincuencia en El Salvador es devastadora y dolorosa. Como CISPES deseamos reconocer y expresar nuestra solidaridad con todos los grupos de jóvenes, comunidades, sindicatos, organizaciones campesinas, movimientos de mujeres y feministas, activistas LGBTQI, ambientalistas, otras organizaciones del movimiento social, funcionarios públicos y todas las personas que luchan y trabajan todos los días para construir una alternativa en su país y eliminar las causas estructurales de la pobreza, la desigualdad, la impunidad y la violencia.

Reiteramos nuestro compromiso organizativo en los Estados Unidos a fin de instar a nuestros cargos electos a que pongan fin a las políticas hacia El Salvador que crean, contribuyen y exacerban la opresión sistémica en el país y en toda la región.

Compañero René Antonio Díaz Orellana, ¡Presente!